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municipales, si bien también se reciben residuos de ranchos, caballerizas, huertos y otras
operaciones agropecuarias, así como de programas de separación doméstica de residuos
orgánicos. El uso principal de la composta producida es para parques y jardines
municipales e instituciones educativas. También se vende, dona o intercambia con
agricultores o con la población en general. En el ámbito estatal se encontraron ocho
empresas dedicadas a la producción y/o comercialización de abonos orgánicos o similares,
principalmente en las poblaciones de Cuitzeo, Los Reyes, Uruapan, Lázaro Cárdenas y
Morelia.
Demanda potencial de la composta
El principal mercado que adquiere la composta se compone de: la agricultura, los centros
de jardinería, las empresas de paisajismo y los proyectos de recuperación de suelos. En el
año 2000, en México existían 262 unidades de producción orgánica, de las cuales, ubicadas
en 28 estados de la República, entre los cuales destacaron Chiapas, Oaxaca, Michoacán,
Chihuahua y Guerrero, que concentraron 82.8% de la superficie orgánica total (Revista
Vinculando, 2007). Para el año 2006 cerca de 250,000 hectáreas se dedicaban a la
agricultura orgánica. Se contaba con más de 50,000 productores. Dos tercios de la
superficie se dedicaban al cultivo del café orgánico. Hasta este año se registraban más de 50
cultivos diferentes y la producción se seguía diversificando. Entre los productores se
registraron grupos indígenas y cooperativas campesinas, granjas familiares y agroempresarios
de escala media (Industria Alimentaria, 2006).
Actualmente de acuerdo a información de la Secretaría de Agricultura, Ganadería,
Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA, 2010), México está consolidado
como quinto productor mundial de cultivos orgánicos, contando son una superficie
destinada para este fin del 2.3% de las 21.7 millones de hectáreas destinadas a la
agricultura, es decir actualmente México cuenta con casi medio millón de hectáreas
cultivadas con productos orgánicos, de entre ellos el café, el ajonjolí, la jamaica y el nopal.
Mostrando con ello un importante mercado potencial nacional de la composta.
Para el año 2008, se produjeron 5,576 toneladas anuales de productos frutícolas orgánicos
en Michoacán, con una prospección al 2009 a 7,200 toneladas. Con una superficie total de
9,625 hectáreas y con una prospección positiva de aumento del 25%, del cual los productos
que presentan una mayor superficie de cultivo son el coco con 8,000 ha, seguido del
aguacate con 697 ha, el mango con 350 ha, el plátano con 300 ha, la jamaica con 150 ha y
la zarzamora con 40 ha. Sin embargo, estos productos en su mayoría muestran un aumento
en el número de hectáreas de cultivo en donde el coco se mantiene en primer lugar con el
mayor número de hectáreas cultivadas con 8,000 ha, en segundo lugar se ubican las frutas
finas con 1,200 ha, en tercer lugar el aguacate con 900 ha, seguido por el mango con 850
ha, el plátano con 400 ha, el limón con 234 ha, la jamaica con 180 y la zarzamora con 100
ha, entre otros (ver tabla 2). Lo que significa una superficie orgánica de 11,864 ha
(PRODUCE, 2008).
Tabla 2. Superficie de cultivos frutícolas orgánicos en Michoacán
Fruto 2008 2009 variabilidad
1 Coco 8000 8000 0%
2398