o_19nhsmha01vhpfpg1knut7kcn4a.pdf

La Asociación Europea de Agencias de Desarrollo Local (2009:7) las define como:
Cualquier organización que tenga:
1) Una misión de desarrollo económico abarcando el interés económico global de una zona
geográfica; 2) lazos significantes con una autoridad regional o local tanto desde el punto de
vista de su financiación como desde sus objetivos; 3) una suficientemente, importante y
relevante área geográfica de trabajo.
En el caso de México, según la SEDESOL (2005) existe una modalidad de ADLs cuyo
objetivo es impulsar procesos de integración y de desarrollo regional, a través del apoyo a
proyectos productivos que vinculen diferentes actividades económicas de una región.
Alburquerque (2002) en su libro “Guía para agentes: desarrollo económico territorial”
menciona las siguientes características de las ADLs:
• Tener objetivos relacionados con el desarrollo económico y social en el municipio o
territorio en cuestión.
• Incorporar o ser el resultado de la concertación de diferentes actores públicos y
privados territoriales por el DL y la generación de empleo.
• Actuar directamente al facilitar la información y asesoramiento tecnológico,
financiero, legislativo, etc.
• Asegurar el acceso a los servicios avanzados de apoyo a la producción.
• Incidir de una manera especial en la rentabilidad social, además de la rentabilidad
económica.
Las ADLs buscan principalmente sentar bases para el crecimiento económico futuro de la
localidad mediante una estructura adecuada que les permite cumplir sus objetivos. Además
del trabajo que debe realizar con las diversas entidades que integran la red, las ADLs deben
colaborar también con las asociaciones de empresarios y profesionales, sindicatos locales,
cámaras de comercio e industria, centros de formación, universidades, organizaciones no
gubernamentales (ONGs), etc. Por lo tanto, las ADLs no forman parte del sector público
regional, sino que son instituciones de promoción económica concebidas como empresas,
que deben actuar como tales, y cuentan con la confianza y la participación del sector
empresarial territorial, así como de las entidades financieras y académicas regionales.
Los logros que se pueden conseguir con la transparencia en el funcionamiento de las ADLs
llegan al reconocimiento de que la localidad es una responsabilidad de todos, a su vez esto
provoca la generación del conocimiento del territorio, de la distribución y la forma en que
vive la población, dando continuidad y visión de largo plazo al proceso de planeación y
gestión de desarrollo urbano, social, económico y cultural de la comunidad.
Así, la planeación será responsabilidad de los participantes de las ADLs, como sujetos
involucrados en el desarrollo urbano, económico, social y cultural de una comunidad. Para
lograr lo anterior es necesario el Agente de Desarrollo local (ADL) como dinamizador,
558