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ciencia, ingeniería y humanidades, generando enfoques nuevos, efectivos y eficientes
(Martínez-García, 2010). Además, el entender y enfrentar temas tan complejos y urgentes
como los relativos a la supervivencia de la especie humana implica la necesidad de
considerar a los ecosistemas como un factor indispensable en los procesos socioeconómicos,
y el reconocimiento de la especie humana como un componente coevolutivo
muy poderoso en dichos ecosistemas (Martínez-García, 2010. El enfoque es
interdisciplinario, multi-dimensional, contextual, histórico, jerárquico, analítico-integrativo,
comparativo y experimental, orientándose a explicar fenómenos y a generar metáforas para
pensar y actuar (Martínez-García, 2010).
Las principales características del enfoque a utilizar para este trabajo son las siguientes
(Martínez-García, 2005 y 2010):
i) El ESCCes es una forma de entender fenómenos complejos desde el contexto del
creador-observador-actor-dueño del sistema. Símbolos, valores, entidades sociales y
culturales son tan reales como los elementos del mundo físico, por lo que las separaciones
entre ciencias duras y suaves no tiene. El enfoque mezcla técnicas ‘duras’ y suaves’,
‘embebiendo’ (Miles, 1988) los sistemas duros (lo que es conocido) dentro de sistemas
‘suaves’ los cuales son de jerarquía superior (el que conoce). Lo anterior resulta en un flujo
permanente, dinámico, co-evolutivo, entre los sistemas duros y los suaves, reconociendo al
lado suave (v.gr. el administrador y su medio ambiente sicológico, social y cultural) como
aquel donde reside la información de alto nivel necesaria para juzgar, escoger, implementar
y asumir la responsabilidad de una solución a un problema determinado.
ii) El ESCCes enfatiza la importancia de los procesos y aspectos relativos al conocimiento
que llevan a la acción. La información se genera-re-crea y/o apropia por el sistema desde
dentro, no desde afuera. Así, el enfoque propone el diseño y aplicación de procesos
cognitivos para generar y apropiarse de conocimientos, reconociendo la individualidad de
la experiencia y perspectiva personales y a la comunicación como base de la acción
colaborativa, y orientándose a internalizar modelos y reglas de decisión, para
transformarlos en heurística en los usuarios.
iii) El enfoque considera a tecnologías tales como los sistemas computacionales de apoyo a
las decisiones como herramientas cognitivas (epistemológicas) y coevolutivas (en constante
desarrollo), ‘embebidas’ en la identidad del usuario, y como fuente de interrogantes
orientadas a apoyar procesos de transformación para lograr los propósitos del
administrador-dueño-creador del sistema, además de ser el producto coevolutivo y
necesariamente limitado de sus creadores-usuarios y sus circunstancias.
iv) El principal problema técnico para lograr sistemas complejos coevolutivos sustentables
consiste en cómo aumentar-mejorar las habilidades de los que toman decisiones para
escoger e implementar acciones en respuesta a sus propósitos y objetivos y a las
condiciones cambiantes de su medio ambiente en tiempo real;
v) Aplicar el ESCCes implica usar, entre otras herramientas, la modelación (para identificar
y describir los procesos que generan ciertos comportamientos), la simulación (para
identificar y describir los productos generados a partir de ciertos insumos), y la
optimización (para encontrar la cantidad de insumos necesaria para obtener el resultado
deseado).
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